16 - LA PATRIA-ESPOSA

Al día siguiente desembarcó en Bouzas don Xosué Quinteiro, que había estado muy ocupado ayudando a organizar el abastecimiento de la frota corsaria el día anterior. Trajo ocho cañones de las naves en varias embarcaciones y pasó varias horas despachando con Buenaventura y Ramón Genaro. Por la tarde tuvo libertad para compartir un poco con Masetti, que estaba de guardia con Telmo Sitge y con sus propios trabajadores, en la primera playa de Alcabre.

El señor Quinteiro le preguntó que le había parecido Ramón Genaro Marcó.

-Muy bien, don Xosué, todo un empresario, como su padre. Estuvo organizando la defensa de Bouzas como organizaría una fábrica moderna, cuidó y supervisó cada detalle, incluso los mas insignificantes, y sabe mandar como si no mandara. ¿Sabe? todo el mundo obedece sus órdenes con gusto.

-¿Tuvieron ustedes tiempo de conversar?-

-Sí, él me preguntó cómo me sentía yo, envuelto de pronto en medio de una guerra entre dos naciones que no eran la mía.-

-¿...Y...?-

-Bueno, yo le dije que acababa de montar una fábrica aquí y que no podía permitir que los ingleses se lleven mis licores sin pagar.-

-Buena respuesta ¿...Y qué dijo él?-

-Él dijo algo así como que el lugar donde uno nace es su patria-madre, pero que su patria-esposa es el lugar donde uno escogió entregar su energía y su amor para crear algo nuevo, y que hay que defender la esposa.-

-Eso lo aprendió de su padre. Hace muchos años, cuando los viejos pescadores de Vigo y Cangas habían comenzado a sabotear las artes de pesca de arrastre traídas por los catalanes, que capturaban muchísima más sardina que las suyas, algunos les gritaban que volviesen para su tierra.

Buenaventura respondió más o menos lo mismo. Y tenía razón, y hoy está cuidando de esta tierra y ayudando a progresar a sus gentes infinitamente mejor que nuestra vieja aristocracia nativa, acomodada en el inmovilismo. La verdad es que cualquier lugar comienza a convertirse en un lugar importante cuando es capaz de atraer a gente de fuera, con sus ideas, capacidades y capitales. Por la misma razón Ventura Miguel se fue a Buenos Aires..-

-¿Qué Ventura Miguel? -

-Otro hermano de Ramón Genaro. Se marchó para esa joven ciudad cuando ella comenzó atraer gente de fuera, porque ya sabía que quien más altos cargos consigue en una comunidad es aquel que contribuye a hacerla crecer desde que comienza a progresar. Ahora mismo es un importante comerciante con gran participación en la vida política y social del Virreinato del Plata.

Antes de esta guerra yo lo fui a visitar allá tres veces, para realizar ante él encargos de su padre, de paso que llevábamos o traíamos mercancías en los barcos.

Aún me acuerdo de cuando Ventura nació, en el comienzo del invierno de 1763. Fue un muchacho tan bien educado como el resto de sus hermanos. Su padre quería que todos ellos comenzaran carreras militares, porque, con el certificado de hidalguía de su madre, esa era la mejor manera de ser nombrados caballeros de alguna orden, ascender socialmente y ocupar cargos importantes en la monarquía.

...Pero Ventura, igual que Ramón Genaro, tenía más vocación de hombre de negocios que de militar o cortesano, y una fuerza de voluntad tenaz, que le permitió defender su vocación.

Así que don Buenaventura le dedicó al comercio de ultramar con la ciudad de Buenos Aires en cuanto se logró levantar para Vigo la prohibición del comercio con las Indias, hasta entonces monopolizado por pocos puertos españoles. En una ocasión me dijo que algún día Buenos Aires llegaría a ser la ciudad mayor de Galicia.

Ventura llegó al recién creado Virreinato del Río de la Plata en 1783, se convirtió en consignatario de buques y fundó la rama platense de la Casa de Crédito Marcó del Pont en la ciudad de Buenos Aires. Cuatro años después, se casó con Francisca Díaz de Vivar, una remota descendiente del Cid, según presumía, hija del alcalde de la capital; y no paran de tener hijos.

Hace nueve años que el chico es síndico del Consulado de Comercio de Buenos Aires, y le comento, Gaspar, que esta institución es la más importante del Virreinato y, ahora mismo, Ventura es el tercer hombre con más poder de aquella tierra, después del virrey y del alcalde de Buenos Aires.

En cuanto llegó a síndico elevó una súplica a nuestro rey, Carlos IV, en representación de los hacendados y de los agricultores, que allá son los dos cuerpos sociales principales.

La súplica es un alegato contra el monopolio de la ciudad de Cádiz y a favor del libre comercio, y la redactó junto con otros hombres notables de allí, personas que yo también conocí, como don Manuel Belgrano, o el señor Escalada. Sé que Ventura Miguel ya es, además, Procurador del Cabildo de Buenos Aires, Alférez Real y capitán de las milicias urbanas.-

Masetti quedó muy interesado: -Don Xosué... ¿Usted piensa que las Indias son un buen lugar para un empresario?-

- Las Indias, Gaspar, amigo, son todo un universo de nuevas posibilidades para un hombre osado, inteligente y trabajador, si sabe fabricar algo con calidad, si tiene experiencia en organizar y dirigir hombres y si tiene experiencia comercial o profesional, o conoce bien un oficio. Porque son regiones inmensas donde todo está por construir. Ahora yo soy un hombre mayor y ya construí toda mi vida aquí, pero si yo tuviese su edad, ni lo pensaba.

El futuro está allá y, además, un futuro de continuo progreso y en paz. En las Indias, los ingleses apenas se atrevieron a atacar puertos, y siempre fueron rechazados. Los franceses y holandeses intentaron establecerse en lugares del litoral del Brasil, e igual fueron expulsados.

Yo le hablé de la antigua Roma, y de la Hispania independiente como la Nueva Roma. En lo más auténtico de cualquiera hispano continúa ardiendo un hispanoromano cristiano, los germánicos fueron sólo unas elites foráneas que dominaron temporalmente el poder, no el corazón de la base del pueblo. Igual que los musulmanes.-

-Supongo que también habrá españoles que no se sientan cristianos.-Apuntó Masetti.

-Si nos sentimos españoles, incluso podemos ser ateos-cristianos y romanos, y todo junto. El carácter de una nación va más alá de las religiones y formas políticas que impregnan su cultura, y , al mismo tiempo, absorbe e integra todas esas identidades. El catolicismo prendió aquí porque era Roma. -Remarcó el señor Quinteiro.- Ahí enfrente, con los ingleses, es diferente, ellos pueden sentirse anglos, germánicos y cristianos, sin embargo, nunca tan romanos cómo nosotros en su base. De manera ninguna. No tuvieron tiempo de romanizarse tanto. Les falta un fervor en aguas del mar latino.-

-Roma decayó y se fragmentó -siguió-, destino de los viejos, y la joven Hispania, en la que permaneció lo mejor del alma de los romanos cristianos en mestizaje con la de los bravos celtíberos, se fue liberando, durante ocho siglos, de los nuevos invasores que querían imponerle otra forma básica bien diferente de ser.

Con toda esa fuerza acumulada, exploró los océanos y creó, desde aquella alma corajosa, un imperio global inmensamente mayor que el de los césares, fundando, en remotas tierras, ciudades con edificios y templos cristianos que recordaban el estilo del apogeo romano.

De igual manera, pienso que, en un nuevo ciclo de la historia, la vieja España Europea decaerá y se fragmentará, tal como le sucedió a la vieja Roma, mas su alma, que es la de Roma cristianizada, reencarnará en una, o dos, o tres grandes Nuevas Hispanias o Luspanias transatlánticas, que, en ese momento, serán la luz y la esperanza del mundo.-

-Bueno- respondió Masetti mirando para el mar de velas británicas que rodeaban completamente las islas Cies frente a ellos y pensando en Sofía-, en tanto que llegue ese día, vamos a intentar defender lo que ya fuimos capaces de construir en esta tierra, sin pensar todavía en una nueva patria-esposa.-

CONTINÚA MAÑANA